Un bálsamo para el alma. Así podría calificarse esta visita que alumnos, profesoras y representantes de Pastoral y la coordinación del Ciclo Básica hicieron esta mañana al jardín infantil Rayén (de la Fundación Integra) en Colina.
Además de llevar numerosos regalos, aportes y ayudas (como juguetes, material de aseo, pañales) donados y juntados por los cursos de 3º a 6º Básico, lo más importante para todos fue conocer otra realidad y crear un vínculo que se espera no termine acá con las tías y los niños de este jardín.
El Jardín Rayen acoge a niños de pocos meses de vida hasta los cuatro años y les brinda cariño, alimentación, educación y compañía. Muchos de ellos, incluso, pasan casi todo el día en las salas cunas de esta institución, ya que sus familias de escasos recursos no pueden cuidarlos.
Nuestros alumnos y sus profesoras jefe tuvieron la valiosa oportunidad de compartir con estos pequeños, alegrarse de lo bien que están en este lugar y agradecer la posibilidad de poder contribuir con aportes juntados por estos cursos para hacer un poco mejor el pasar de estos niños, muchos de ellos hijos de inmigrantes haitianos, dominicanos, bolivianos, peruanos y colombianos, como explicó la Directora del jardín, Claudia Beas.
A su vez, las tías del jardín agradeció a la delegación del colegio con un pie de cueca, un recuerdo elaborado por ellas y los niños y un rico desayuno.
Una experiencia muy enriquecedora para todos que seguro el CVDCH repetirá con éste y otros jardines, al igual como se hace con la Residencia Los Tilos.